Previsto inicialmente para el 5 de Febrero, finalmente tuvo que ser el 24 de Marzo cuando pudimos disfrutar del directo de Varry Brava en La 2 de Sala Apolo, en un concierto incluido dentro del ciclo Cruïlla de Primavera. Liderados por la voz de Óscar Ferrer, la incansable energía de Aarön Sáez a los teclados, Vicente Illescas a la guitarra, los tres muy bien acompañados por Juan Tae al bajo y Germán Sevilla a la batería, nos ofrecieron un show lleno de energía, sonidos rompedores, electrónica, sintetizadores, puestas en escena ochenteras, y bailes frenéticos.
Como bien se merecía la noche, pudimos viajar a través de todos sus temas más icónicos, tanto los más recientes como clásicos de su discografía. Cantamos juntos canciones como No Gires o Calor, temas que forman parte de Demasié, el primer trabajo de Varry Brava allá por 2012. También gozamos de lo lindo con Satánica, tema que forma parte de Furor, su penúltimo trabajo publicado en 2018. Un concierto que, además de ser un viaje por toda su discografía, nos despertó a todos muy buenos recuerdos.
También se sumaron al concierto los argentinos Miranda!, descubiertos por Aarön de manera casi involuntaria y con los que interpretaron Hortera, tema que también da nombre a su último trabajo publicado a finales de marzo del 2020. Éste, incluye temas que pudimos bailar durante la noche como Luces de Neón o Loco, canción que sirvió para poner a todos los presentes a <<perrear>> . Un tema que representa a la perfección la esencia de Varry Brava, el valor de la autenticidad, la ausencia del miedo a probar cosas nuevas y la felicidad por hacer lo que uno siente en todo momento.
No podía faltar por supuesto la interpretación de Raffaella, el tema con el que participaron en el Benidorm Fest y con el que optaron a ser los representantes de nuestro país en el festival de Eurovisión. Cambio de vestuario para representar este himno y todos a bailar con este homenaje a la Carrà. La voz de todos los presentes nos confirmó una cosa, y es que muchos de nosotros hubiéramos querido verles en Turín, ciudad donde se celebra este año el Festival.
Culminaron el show con La Ruta del Amor, un clásico de los finales de concierto de Varry Brava, donde aprovechan para poner en escena todo el despliegue de sonidos electrónicos. Fue el fin de fiesta perfecto tras hora y media sin parar de mover nuestros cuerpos al son de cada uno de sus temas.
Tuvimos que esperar un poco más de lo inicialmente previsto, pero Varry Brava nos regaló un concierto redondo, increíble y memorable.
Artículo de Eva Ladevesa (twitter.com/miviajemusical) para ElFiesta.es