Mapa Mudo nos vuelve a deleitar con un nuevo álbum, una obra cargada de simbolismos y que por diversas dificultades para su autor tardó en plasmarse en formato de registro sonoro. Es asombroso lo que nos ofrece esta vez este polifacético músico, un álbum con ocho pistas, una de las cuales es una suite de 27 minutos, dos vídeos; "Ósmosis" y "Enana Amarilla", uno de ellos en directo, y material adicional como fotos, textos y carátulas.
Volvemos a encontrarnos con una gran variedad de sonidos, estilos e influencias, utilizando escalas y armonías clásicas combinados con texturas y sonidos electrónicos. No solo esta diversidad se da en lo propiamente sonoro, también en lo concerniente a la forma, desde brindarnos con una canción, llevándonos por diversos ambientes sonoros electrónicos, encontrarnos con temas más rockeros e incluso llegando a una extensa suite sinfónica.
Todo el álbum está compuesto por Mapa Mudo, excepto dos fragmentos arreglados con gran gusto sobre piezas de Gustav Mahler y de Richard Strauss. El álbum culmina con un homenaje a un célebre grupo pionero de música electrónica clásica de la Escuela de Berlín, haciendo un juego de palabras con su nombre.
TAMICES (CÖDA Records / Ataque!, 2020) es todo un viaje sensitivo y emocional, sensorial y emotivo, en el que nos lleva de un tema a otro con extraordinaria fluidez, utilizando piezas puente para conseguir esto con mayor eficacia. Paisajes sonoros, progresiones armónicas, solos envolventes, texturas coloristas y todo tipo de peripecias musicales que hacen de este disco una obra extraordinaria y extrasensorial. Indispensable.
